Los cuentos que recoge este volumen tienen casi todos como factor común la fiebre de los buscadores de oro en Alaska durante la segunda mitad del siglo XIX. El oro enriqueció a algunos y destruyó a muchos, convirtiéndose así en una auténtica "quimera". Historias duras, trágicas o solidarias, todas tienen como escenario estas heladas tierras. Porque la verdadera protagonista es la inmisericorde naturaleza helada, ese impresionante silencio blanco, preludio de la muerte. Frente al implacable frío polar, la lucha del hombre por la supervivencia en un medio hostil; protagonizada por seres generosos ("El silencio blanco", "La ley de la vida"), estafadores ("Demasiado oro"), inútiles y degradados ("En un país lejano"), avariciosos ("El hombre de la cicatriz"), o por la astucia ("El burlado") o la obstinación angustiosa y rabiosa de sus protagonistas ("Las mil docenas", "El amor a la vida", "La hoguera", "El diablo").