Forzada por un aristócrata y condenada por una sociedad de moral estricta, Tess, descendiente de una familia aristocrática empobrecida, se rebela contra el destino que se le impone guiada por su innata independencia, su incomprensión ante el doble rasero con el que se juzga la conducta de los sexos y por su invencible deseo de alcanzar la felicidad.