"La mejor obra dramática del año fue de Mariana Silva: Sobre lobos, un texto solvente que evita ofrecer una lección moral para concentrarse en revelar la profundidad psíquica de dos mujeres una arisca chica de clase media y una ex vedette decadente que se transforman delante de nosotros gracias a un vínculo lleno de comprensión, hondura y verdad. Una obra emocionante, desgarrada y perturbadora, una experiencia de inmersión en las sombras que, pese a ello, nos regala uno de los finales más luminosos del teatro peruano reciente" (Jeremías Gamboa)